50 de una en una
CÉSAR FARÍAS
LA SELECCIÓN ES UN MAR DE DUDAS
1.- ¿Es cierto que jugó sólo cinco partidos como profesional?
- Ehh, cinco en primera. Después tienes que meter los partidos de la Copa Lotogol, organizada por la Lotería de Oriente donde participaron muchos jugadores de primera división, y era el preámbulo de la Copa Venezuela. Fueron, entonces, como diez partidos más que jugué como profesional.
2.- ¿Con qué equipo?
- Con Monagas.
3.- ¿Cuál fue el motivo de su precoz salida de las canchas?
- Realmente fue una posición que tomé al ver lo sumergido que estaba nuestro fútbol, condenado a cosas que eran incoherentes. El trato hacia el profesional era muy precario y el trabajo en inferiores era casi inexistente. En ese momento pensé, que la realidad no la podían cambiar los jugadores, que como entrenador o como entrenador/dirigente podía aportar mucho más. Por eso comencé la preparación que continúa hasta el día de hoy y creo que continuaré hasta que Dios me dé vida.
4.- ¿En qué posición jugaba?
- Jugaba de central y de cinco.
5.- ¿Era de esos cincos que pasaba el balón y no el jugador?
- Sí, era metedor. Es una característica de vida pero entendía bastante el juego.
6.- ¿Cuáles fueron sus momentos más memorables como jugador?
- Viví cosas en amateur muy bonitas, crecí jugando entre el colegio Larey y el Club Táchira a los siete años. Son momentos que uno todavía recuerda cuando va a Caracas y pasa por esas canchas. Después tuve la dicha de volver a Cumaná y participar en las selecciones de Sucre, fuimos campeones juveniles en Falcón y después vine a reforzar a la selección de Anzoátegui con la que perdimos en la final en Maracaibo. De ahí salté al profesional y disfruté mucho el tiempo que estuve ahí, me ayudó a crecer mucho, me ayudó a reflexionar y encaminar mi vida hacia el sueño que quería de estar dentro de la actividad que tanto me apasionaba.
7.- ¿A qué técnico recuerda con más afecto de esa época?
- Tengo dos técnicos en especial que son Miguel Gamardo y Don Víctor Pignarelli, además a Don Antonio Mejía, que son técnicos que realmente me marcaron mucho. No puedo dejar de mencionar a Celso Oliveira que fue entrenador mío en las inferiores por muchos años, el papá de Dani Oliveira. En mi etapa como entrenador influyeron muchísimo Lino Alonso y “Pepito” Hernández, además que tuve la suerte de estar afuera y compartir con Parreira, con el “Gordo” Púa, Pekermann, Bielsa, entre otros tantos. También a Rafa Santana que tuvo que ver en algunas cosas positivas y negativas que también me ayudaron mucho a pelear, a empujar y a saber que podía llegar a estar a la talla de él o por encima y eso hoy en día se lo agradezco.
8.- ¿Siempre tuvo esa voz de mando para dirigir? Por ejemplo, en las caimaneras mandaba a sus amigos a cubrir las marcas y a tapar al más alto para que no cabeceara.
- Bueno sí, obviamente desde niño siempre jugaba de central, pasé muchos años del Club Táchira siendo capitán, en el colegio nunca fui capitán pero siempre era el único al que no sacaban de la cancha. Tal vez en momentos eso me trajo algunos inconvenientes, cuando vas creciendo con esa personalidad y no tienes gente de jerarquía que te dirija, te desorientas un poco y ello te trae choques pero te hace crecer.
9.- ¿Cuáles fueron los primeros títulos que ganó como técnico?
- El primer título nacional fue en el año ’96 con el Nueva Cádiz sub-20, lo ganamos invicto, lo repetimos en el ’97 con cuarenta y cuatro partidos invictos. Después en el ’98 en la segunda división perdimos apenas dos partidos y subimos como campeones. Ganamos otro campeonato de ascenso con Zulianos. Además de haber ganado los de aspirantes que había en ese momento y los estadales, locales que servían para ir acumulando pero claro no tenían la misma connotación publicitaria.
10.- ¿Se graduó como técnico en el Nueva Cádiz luego de sacarlo campeón invicto en el sub-20?
- Son pasos. Siempre pensé que invertir en mí, que era mi empresa y que parecía una locura en ese momento, al final iba a ser positivo y podría darle una estabilidad a mis hijos, a mi familia y eso me hizo luchar contra viento y marea. Dicen que cuando uno le dedica una hora diaria de lectura a su profesión durante tres años te conviertes en un instructor estadal, cuando le dedicas cinco eres un instructor nacional y cuando acumulas siete o más años de trabajo eres uno internacional. Y para poder hacer lo que hicimos en Copa Libertadores y Sudamericana, teníamos que graduarnos de técnicos internacionales. Nueva Cádiz fue un paso importantísimo en mi vida que siempre va a estar presente, al igual que todos los equipos que he dirigido.
VEA LAS 50 PREGUNTAS COMPLETAS EN LA EDICIÓN IMPRESA DE EL ASTRO MAGAZINE OCTUBRE 2007
CÉSAR FARÍAS
LA SELECCIÓN ES UN MAR DE DUDAS
1.- ¿Es cierto que jugó sólo cinco partidos como profesional?
- Ehh, cinco en primera. Después tienes que meter los partidos de la Copa Lotogol, organizada por la Lotería de Oriente donde participaron muchos jugadores de primera división, y era el preámbulo de la Copa Venezuela. Fueron, entonces, como diez partidos más que jugué como profesional.
2.- ¿Con qué equipo?
- Con Monagas.
3.- ¿Cuál fue el motivo de su precoz salida de las canchas?
- Realmente fue una posición que tomé al ver lo sumergido que estaba nuestro fútbol, condenado a cosas que eran incoherentes. El trato hacia el profesional era muy precario y el trabajo en inferiores era casi inexistente. En ese momento pensé, que la realidad no la podían cambiar los jugadores, que como entrenador o como entrenador/dirigente podía aportar mucho más. Por eso comencé la preparación que continúa hasta el día de hoy y creo que continuaré hasta que Dios me dé vida.
4.- ¿En qué posición jugaba?
- Jugaba de central y de cinco.
5.- ¿Era de esos cincos que pasaba el balón y no el jugador?
- Sí, era metedor. Es una característica de vida pero entendía bastante el juego.
6.- ¿Cuáles fueron sus momentos más memorables como jugador?
- Viví cosas en amateur muy bonitas, crecí jugando entre el colegio Larey y el Club Táchira a los siete años. Son momentos que uno todavía recuerda cuando va a Caracas y pasa por esas canchas. Después tuve la dicha de volver a Cumaná y participar en las selecciones de Sucre, fuimos campeones juveniles en Falcón y después vine a reforzar a la selección de Anzoátegui con la que perdimos en la final en Maracaibo. De ahí salté al profesional y disfruté mucho el tiempo que estuve ahí, me ayudó a crecer mucho, me ayudó a reflexionar y encaminar mi vida hacia el sueño que quería de estar dentro de la actividad que tanto me apasionaba.
7.- ¿A qué técnico recuerda con más afecto de esa época?
- Tengo dos técnicos en especial que son Miguel Gamardo y Don Víctor Pignarelli, además a Don Antonio Mejía, que son técnicos que realmente me marcaron mucho. No puedo dejar de mencionar a Celso Oliveira que fue entrenador mío en las inferiores por muchos años, el papá de Dani Oliveira. En mi etapa como entrenador influyeron muchísimo Lino Alonso y “Pepito” Hernández, además que tuve la suerte de estar afuera y compartir con Parreira, con el “Gordo” Púa, Pekermann, Bielsa, entre otros tantos. También a Rafa Santana que tuvo que ver en algunas cosas positivas y negativas que también me ayudaron mucho a pelear, a empujar y a saber que podía llegar a estar a la talla de él o por encima y eso hoy en día se lo agradezco.
8.- ¿Siempre tuvo esa voz de mando para dirigir? Por ejemplo, en las caimaneras mandaba a sus amigos a cubrir las marcas y a tapar al más alto para que no cabeceara.
- Bueno sí, obviamente desde niño siempre jugaba de central, pasé muchos años del Club Táchira siendo capitán, en el colegio nunca fui capitán pero siempre era el único al que no sacaban de la cancha. Tal vez en momentos eso me trajo algunos inconvenientes, cuando vas creciendo con esa personalidad y no tienes gente de jerarquía que te dirija, te desorientas un poco y ello te trae choques pero te hace crecer.
9.- ¿Cuáles fueron los primeros títulos que ganó como técnico?
- El primer título nacional fue en el año ’96 con el Nueva Cádiz sub-20, lo ganamos invicto, lo repetimos en el ’97 con cuarenta y cuatro partidos invictos. Después en el ’98 en la segunda división perdimos apenas dos partidos y subimos como campeones. Ganamos otro campeonato de ascenso con Zulianos. Además de haber ganado los de aspirantes que había en ese momento y los estadales, locales que servían para ir acumulando pero claro no tenían la misma connotación publicitaria.
10.- ¿Se graduó como técnico en el Nueva Cádiz luego de sacarlo campeón invicto en el sub-20?
- Son pasos. Siempre pensé que invertir en mí, que era mi empresa y que parecía una locura en ese momento, al final iba a ser positivo y podría darle una estabilidad a mis hijos, a mi familia y eso me hizo luchar contra viento y marea. Dicen que cuando uno le dedica una hora diaria de lectura a su profesión durante tres años te conviertes en un instructor estadal, cuando le dedicas cinco eres un instructor nacional y cuando acumulas siete o más años de trabajo eres uno internacional. Y para poder hacer lo que hicimos en Copa Libertadores y Sudamericana, teníamos que graduarnos de técnicos internacionales. Nueva Cádiz fue un paso importantísimo en mi vida que siempre va a estar presente, al igual que todos los equipos que he dirigido.
VEA LAS 50 PREGUNTAS COMPLETAS EN LA EDICIÓN IMPRESA DE EL ASTRO MAGAZINE OCTUBRE 2007
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